Cuando se trata de nuestras caras, no confiamos en cualquiera que nos diga qué necesita nuestra piel para tener ese resplandor que soñamos. Por eso buscamos los consejos de la experta en cuidados de la piel, Renée Rouleau, que sabe que se necesita más que sólo buenos productos para estar radiante.
La piel sensible tiene necesidades especiales. Los típicos síntomas como enrojecimiento, irritación , eczema, sequedad , rosácea, y erupciones cutáneas, deben tratarse apropiadamente. Las mujeres de piel sensible a menudo empeoran su condición sensible con 5 errores comunes. Lee con atención para evitarlos, de manera que obtengas una piel calma y de aspecto saludable.
Error nº1: No Tratar La Piel Seca De La Manera Apropiada
Tu piel tiene una barrera protectora hecha de lípidos naturales (propios del cuerpo) que la mantienen humectada y sin irritaciones. Cuando la barrera está dañada (debido a la edad, las hormonas, el aire seco, la genética, el calor, rosácea, el uso de productos muy fuertes o exceso de exfoliante) se hacen grietas diminutas e invisibles en la piel. Esto permite que la humectación se vaya, dejando la piel seca y débil.
Además, los factores irritantes podrán entrar más fácilmente, haciendo que incluso productos para piel sensible causen sensación de picor. Una barrera dañada es la causa subyacente de una piel sensible. Usa serums reparadores, humectantes y aceites de tratamiento que sean ricos en lípidos, para reducir la sensibilidad de la piel y la sequedad. Estos ingredientes contienen aceite de cranberry, aceite de rosa mosqueta, aceite de primavera, aceite de jojoba, aceite de almendras, fosfolípidos, ácido linoleico o escualano.
Con el uso continuo, estos ingredientes corregirán la falta de aceite y de hidratación profunda a través de las capas de piel, y disminuirán bastante la sequedad, el enrojecimiento y la irritación.
Error nº2: Lavarse Con Un Limpiador Muy Fuerte
Lavarse la cara en la mañana y en la noche es esencial para tener una piel sana, pero usar un cleanser poco adecuado puede irritarla. Muchos jabones y geles limpiadores son formulados con ingredientes como lauril sulfato de sodio , lauril éter sulfato de sodio, o sulfato de lauril amonio. Estos son tensioactivos usados para sacar la grasa de la piel, pero son particularmente duros y sacan toda el agua, dejando la piel con un sensación tirante y más irritada. Una buena regla: mucha espuma, más sequedad; menos espuma, menos sequedad. Usa siempre Jabones o Limpiadores libres de Sulfato que no secarán tu piel. No recomiendo jabones en barra, aunque digan que tiene humectantes añadidos, no deben ser usados en la cara porque los ingredientes que contiene resecan tanto como los sulfatos de los limpiadores líquidos, si no más! Las lociones limpiadoras son la mejor alternativa versus los geles espumantes y son más delicados con tu piel sensible.
Error nº3: No Hacerse Parches De Prueba Cuando Usas Un Producto Nuevo
Es una buena práctica hacer parches de prueba, aunque hayas elegido productos únicamente formulados para tus necesidades de piel seca o sensible. No vale la pena sufrir la irritación de la piel y el enrojecimiento de tu cara para comprobar que tu piel no es compatible con el nuevo producto. El mejor lugar para hacer un parche de prueba y comprobar la reacción de la piel, es el lado del cuello. Esta área es un buen punto de partida para chequear compatibilidad porque la piel es más delgada y por lo mismo, generalmente más reactiva. La idea es que si el producto es tolerado en el cuello, puedas tener la confianza de que también será así en la cara. Y en el caso que el producto genere una reacción, es mejor tener rojo e irritado el cuello que la cara. Así que aplica una pequeña cantidad de producto en el lado del cuello, frótala suave y espera 24 horas. Si no hay una reacción adversa, entonces el producto es seguro para continuar usándolo.
De todas maneras, ten en mente que este procedimiento es para testear una posible reacción alérgica, no una reacción crítica.
Error nº4: Introducir productos nuevos muy bruscamente
Cuando estás empezando a usar un producto nuevo para tu piel, lo mejor es que te lo tomes con calma, aunque estés ansiosa por incluirlo en tu rutina de cuidados. Aunque hayas hecho un parche de prueba en tu piel y no haya habido una reacción negativa, es mejor aplicar el nuevo producto a tu piel cada 5 días. Si de esta manera aparece una reacción negativa, es más fácil identificar cuál es el producto que la está causando. También recomiendo evitar productos que contengan colorantes y fragancias sintéticas (si dice “fragrance” o “perfume” en la lista del envase), que son irritantes y casi nunca son compatibles con las pieles sensibles.
Deberías buscar en el mercado productos que contengan aceites suaves, como rosa, lavanda y jasmín, pero ten en mente que la química del cuerpo juega un rol importante en determinar cómo reaccionará tu cuerpo a distintos productos o algunos ingredientes, así que sigue el consejo del parche de prueba!
Error nº5: Hacerse un tratamiento de microdermoabrasión
La microdermoabrasión es simplemente demasiado fuerte para las pieles sensibles, una exfoliación está perfecto. Como ya mencionamos, la piel sensible se debe a que la barrera protectora de la piel está dañada, lo que permite penetrar a los irritantes y pierde la humectación. Ya que los tratamientos de microdermoabrasión está diseñada para traspasar la barrera protectora de una manera agresiva, lo que continuará agravando la condición sensible de tu piel. A parte la aspiración en vacío de la aspiradora que se usa para desgastar los cristales a través de la piel, pueden dilatar capilares y aumentar visiblemente el enrojecimiento. En vez, opta por peels suaves en químicos o tratamientos faciales leves.
Evitando los 5 errores anteriores y cuidando tu piel sensible apropiadamente puedes aspirar a tener una piel mucho más sana y radiante!!