Más fácil de lo que pensamos!!!
Especialmente en invierno o en situaciones de estrés nos dan ganas de caer ante la tentación de productos azucarados para saciar nuestra ansiedad.
La Universidad de Exeter junto a la Universidad de Harvard nos indican que caminando con un mínimo de 15 minutos al día se puede reducir considerablemente “los antojos”. Para llegar a esta conclusión, se hizo un experimento con un grupo de 78 personas que comían de forma habitual chocolate. Se comprobó que los que se “sometieron” a caminar de forma habitual con el tiempo mencionado anteriormente, consumieron la mitad de chocolate que los que descansaron sin hacer actividad física.
Los neurocientíficos nos indican que los efectos del ejercicio físico a nivel cerebral, regulan estas adicciones relacionadas como los procesos de recompensa del cerebro. Por lo tanto, si eres de las que después de comer tienes unas ganas incontroladas de comer algo dulce, es preferible que camines al menos 15 minutos antes para evitar caer en la tentación.
Caminar habitualmente posee innumerables beneficios: Mantener el colesterol a raya, si lo haces a conciencia, manteniendo el abdomen plano, trabajarás también glúteos y piernas, Mejoras también el metabolismo, especialmente si se realiza a un buen ritmo y regular.