En Francia tienen la capacidad de hacer de elementos simples y recetas sencillas, un plato tan lujoso y espectacular que competirá quitándole el protagonismo al plato principal.

Se describe como una preparación de papas crujientes y tiernas, vinculadas a finas hebras de cebolla caramelizadas, ideal para cuando quieras sorprender sin tener tanto tiempo.

Ingredientes

# 1 kilo papas (alrededor de 3 papas grandes o 4 medianas), peladas y cortadas en rodajas de 1/4 de pulgada de grosor
# 1 1/2 cucharadita de sal
# 5 cucharadas de mantequilla sin sal
# 1 cebolla grande, en rodajas finas
# 1/4 cucharadita de pimienta negra recién molida
# 1/4 taza de perejil fresco picado en trozos grandes

Preparación

·Poner las papas en rodajas con una cucharadita de sal en una olla mediana y cubrir con agua fría (sobrepasando 1 pulgada de agua por sobre las papas). Hacer hervir el agua a fuego algo y una vez hervida, bajar a fuego medio y cocinarlas durante 5 minutos. Escurrir las papas y dejar enfriar.

· Mientras tanto, derretir dos cucharadas de mantequilla en un sartén antiadherente a fuego medio. Agregar la cebolla cortada con 1/4 de cucharadita de sal y revolver hasta que se caramelice estando ligeramente dorada (12 minutos aproximadamente). Reservar las cebollas en un tazón.

· Derretir las tres cucharadas de mantequilla restante en el mismo sartén. Agregar las papas y aliñar con pimienta y sal. Revolver las papas y cocinar ocasionalmente para que todas las papas tengan mantequilla (con suavidad para que no se rompan las papas) hasta que las papas estén doradas. Volver a poner las cebollas al sartén, cocinar por dos minutos más para integrar y decorar con perejil.