“Mientras me sentía cada vez más frustrada por comer varias formas de lechuga y regañarme a mí misma en la cinta (lo que siempre conducía inevitablemente a atracones), comencé a seguir a algunas chicas en Instagram que estaban haciendo BBG y no podían creer sus transformaciones”, compartió Arielle. La fórmula está en ganar equilibrio, constancia, salud y felicidad!
Hizo un estudio alimenticio… eliminó todo lo que le caía mal, como por ejemplo la soya, algunas verduras, lácteos y otros (Cada persona es diferente… distintos requisitos en la alimentación). Enfatizó sobre la importancia de comer de manera correcta, como clave de este cambio total de vida: físico y mental.
“Me sorprendió la cantidad de comida que comía (de buena manera) y obtuve excelentes resultados”. El cambio fue de 1,000 calorías a 1,800 calorías de 40 por ciento de carbohidratos, 30 por ciento de proteínas y 30 por ciento de grasa, aunque a veces seguía una proporción de 35 por ciento de carbohidratos / 30 por ciento de proteínas / 35 por ciento de grasa.
También cambió su rutina de alto rendimiento por pilates para desestresar el cuerpo. Sumado a una rutina de 28 minutos (A diferencia del pasado, donde pasaba horas en la trotadora).
Para Arielle, sentirse bien realmente se ha convertido en la meta, y hacer las cosas que la hacen sentir mejor también en cambios físicos. “Muchos de nosotros no nos damos cuenta de lo bien que podemos sentirnos si tomamos ciertas medidas”, dijo.
No como menos que en mi foto anterior, ni hago más ejercicios. De hecho, como más, mejor y me muevo de maneras en que mi cuerpo responde en lugar de hacer cardio sin fin. MÁS restricción “Más ejercicio, a menudo no es la respuesta. ¡Es hora de cambiar esa narrativa en nuestras cabezas!”