Te tenemos una buena noticia! Resulta que muchos de los productos de belleza básicos que ya tienes, pueden hacer muchas más maravillas de las que te imaginabas… Echa una mirada a estos 6 trucos que te ayudarán al mismo tiempo a verte bella y ahorrar dinero!!
1. Talco, usado para que nuestras pestañas se vean más gruesas. Probablemente ya conoces el truco del shampoo en seco. Pero sabías que el talco también puede hacer que tus pestañas se vean más gruesas y largas? Después de aplicar una capa de rímel, usa un cotonito o una varilla de rímel para aplicar un poco de talco en tus pestañas. Luego haz una segunda capa de mascaras y… vavavoom!!
2. Corrector, usado como primer para sombra de ojos. Para que tu sombra de ojos se mantenga perfecta todo el día y no se corra, aplica un poco de correctos sobre tus párpados antes de poner la sombra.
3. Rímel transparente,usado como gel para cejas. O para dominar los pelitos cortos. O como un primer antes de tu mascara…
4. Cold Cream, usada para remover el maquillaje. Esta clásica crema hace maravillas!
5. Rubor en crema, usado como lápiz labial. O viceversa. Trata de elegir un producto en tonos más rosados o rojizos. Los colores damasco o coral pueden ser más complicados.
6. Vaselina, usada como crema de cutículas. Créenos, no es necesario que compres una crema específica para tus cutículas. La vaselina funciona a la perfección y su precio nos encanta!
No queremos sonar alarmistas, pero hay cosas sobre el mundo de la belleza que muchas veces preferiríamos no saber… como el hecho de que el envejecimiento comienza a los 25 años, y que muchos cosméticos son hechos con orina… plop! Bueno, aquí les tenemos algunos consejos, que puede que no les agraden, sobre las manicuras.
Aunque nuestras uñas se ven taaan lindas recién hechas y pintadas de nuestro color favorito, hay que considerar varios factores relacionados con la higiene!
1. Las cutículas o padrastros pueden causar una infección.
Estas uñas largas se ven lindas en Instagram, pero podría haber todo tipo de gérmenes rondando bajo las puntas, incluyendo hasta materia fecal y estafilococos. Tener cortes y heridas en tus manos por las cutículas hace que seas más propensa a infecciones. Muchas bacterias viajarán desde tus dedos a tu boca, tus ojos y tu nariz.
2. Tienes muchísimos nervios en tus dedos.
Hay más receptores de nervios por milímetro cuadrado en tus dedos que en tus brazos y piernas. Es por eso que un corte al hacerte la manicura puede doler tanto! Puedes evitar las cutículas sangrantes y uñas rotas humectando tus manos a menudo. Si no te preocupas de tus uñas éstas se partirán, saltarán y te harás heridas más fácilmente.
3. Asume que todos pueden tener VIH+.
Existe una precaución universal en la industria de las manicuras en asumir que cualquiera puede ser VIH+. Tienes contacto con bacterias que potencialmente podrían tener sangre e infecciones, por lo que hay que tomar medidas de la misma forma como se hace en la industria de los tatuajes. Como clienta debes fijarte bien de que los instrumentos no se compartan entre otros clientes y que sean desinfectados entre cada uso.
4. Hay piel bajo tus uñas también.
El hiponiquio es la piel que puedes ver creciendo bajo el costado de tu uña. Cuando limpias debajo de tus uñas, a veces hay unas pequeñas hilachas blancas, las que pueden interferir con el sellado del borde libre. Usa un pequeño bloque de pulido para despejar los escombros de hiponiquio o empújalo hacia abajo para lograr que tu manicura dure más tiempo.
5. Comerte las uñas puede causar tejido cicatricial.
Ojo las chicas que se comen las uñas! Si sigues con este hábito, con el tiempo, podrías terminar con uñas que se curvan hacia arriba y dedos adormecidos. Cuando muerdes tus uñas estás causándole daño a las terminaciones nerviosas que son las que producen la sensibilidad que tenemos en nuestros dedos. Hay personas que se comen tanto las uñas que terminan produciendo tejido de cicatriz el cual afecta el lecho de la uña, por lo que tus uñas pueden terminar creciendo hacia arriba o en ángulo.
6. La lima mecánica mata la keratina.
Corre si la manicurista saca el Dremel (esa maquinita que requiere una mascarilla). Con tanto pulir, lijar y limar estás sacando poco a poco la keratina de tus uñas, causando el “círculo de fuego”. El círculo de fuego no es otra cosa que un semicírculo rojo que aparece bajo la piel cerca de la punta de las uñas. Si limas o lijas en exceso, empezarás a ver células de sangre bajo tus uñas. Lo único que puedes hacer, es esperar a que esto crezca, y puede ser doloroso.
7. Las micro roturas son la razón por la que tus uñas se quiebran.
Además de aplicar aceite de cutícula y crema de manos todos los días, querrás revisar que no hayan micro roturas. Estos son esos diminutos pedazos de uña que se enganchan en tu sweater y eventualmente termina quebrándose tu uña. Usa una lima de metal para pasar por los bordes cada dos días aprox.
8. Remojar tus uñas en el salón sólo acortará la vida de tu manicura.
Di no gracias, al remojo antes de la manicura. No deberías remojar tus manos, ducharte o lavar los platos justo antes de hacerte las uñas ya que éstas absorben el agua y se expanden. Luego el esmalte no se fija bien, ya que la uña se encoge, volviendo a su tamaño normal una vez que se seca.
9. No cortes las cutículas!
En algunos países hasta es ilegal… No dejes que te corten las cutículas ya que es muy fácil contraer infecciones. Además, una vez que empiezas a hacer esto, las cutículas crecen muy rápidamente y no tan bonitas como lo hacían naturalmente, por lo que vas a querer cortarlas regularmente. Aunque no es lo óptimo, lo más seguro es empujarlas hacia atrás.
En Cut y Paste somos de la opinión que sobre gustos no hay nada escrito, y que muchas veces hay cosas que funcionan a la perfección para algunas personas, y para otras no tanto. Por eso creemos que cada una debe probar que es lo que funciona para ella dentro de su estilo personal y su rutina. Por otra parte, hay errores o más bien dicho, malos hábitos de belleza, que lo único que hacen es dañar nuestro cuerpo y creemos que esos son los errores que hay que eliminar!
Este 2015 deja atrás algunos malos hábitos que arruinan la salud de tu piel, cabello y uñas!
1. Comerte las uñas.
Seguro no es la primera vez que te propones dejar este hábito. Este 2015 de verdad tratar de lograrlo! No sólo es un hábito desagradable, si no que también es poco sanitario. Recuerda por donde han pasado tus manos durante el día!
Afortunadamente hay varios productos que pueden ayudarte con esto. Están los clásicos esmaltes de uña con malos sabores. Y otro tip que puede servirte: hacerte manicuras regularmente. Tengo amigas que han hecho esto y de verdad les ha servido. Además es una situación win-win porque eliminas un mal hábito y además tus uñas siempre se verán fabulosas.
2. Apretarte los granitos y espinillas.
Al igual que dormir con maquillaje, este es un NO de belleza que seguro te han dicho miles de veces. Déjalo en manos de los profesionales mejor. Una dermatóloga o cosmetóloga te dirá que tu piel se recupera más rápido cuando no la pellizcas. Sabemos que es difícil resistirse a apretar los granos y espinillas, pero con un poco de autocontrol lo lograrás!
3. No cambiar tu rutina de belleza con las estaciones.
Hay algo que debes tener claro: tu piel cambia durante el año. Lo que funciona para el verano no lo hará para el invierno. Cuando empieza el frío, la piel de tu rostro necesita más humectación y protección que en los meses más cálidos. Preocúpate este nuevo año de tener un régimen de belleza de acuerdo a las estaciones y tu piel estará brillante y saludable.
4. Ignorar tus cutículas.
Cutículas sanas con el secreto para unas uñas saludables. Y, mantenerlas no significa simplemente hacerse manicuras regularmente. Ten en tu velador un aceite esencial y aplícalo en tus manos antes de ir a dormir. Un aroma como lavanda puede ser agradable y además promueve el buen dormir.
5. Dormir sin sacarte el maquillaje.
Ya hemos dicho numerosas veces lo terrible que es para la piel no remover el maquillaje antes de dormir. Si de verdad te cuesta mucho ir al baño a lavar tu cara en la noche, deja siempre un paquete de toallitas desmaquillantes en tu velador. Aunque lo mejor es lavarte la cara, así por lo menos saldrá el maquillaje.
6. No usar SPF.
No importa cuántas veces lo hayamos dicho, vale la pena seguir repitiéndolo: hay que usar protector solar todos los días (como mínimo SPF 30). El cáncer a la piel es una de las formas de cáncer más comunes. Usar SPF todos los días realmente puede ayudarte a disminuir el riesgo y a evitar el envejecimiento prematuro de la piel.
7. No cortarte el pelo lo suficiente.
Incluso si no te haces un corte drástico cada vez que vas a la peluquería, mantener cortes regulares es la clave para que tu cabello esté sano.
8. Acondicionar tu cabello de forma incorrecta.
Incluso si no te lavas el pelo con shampoo todos los días, necesitas asegurarte de que las puntas del cabello reciben la hidratación necesaria. Esto significa encontrar el acondicionador que funciona para ti, con un uso bastante seguido.