Aunque no lo creas, nuestro cerebro no está diseñado para mantenernos positivas, sino para que estemos alertas y veamos potenciales obstáculos. En otras palabras, fue hecho para buscar problemas y así ayudarnos a sobrevivir. Loretta Breuning Ph.D, autora del libro “The Science of Positivity”, asegura que nuestro cerebro no está diseñado para crear felicidad, aunque nos encantaría. En cambio, guarda las sustancias químicas de nuestro organismo como dopamina, serotonina y oxitocina para las ocasiones en que surge alguna necesidad de supervivencia y las libera en dosis muy controladas, que son rápidamente metabolizadas por el organismo.

 

 

Obviamente esto funcionaba a la perfección en los tiempos pasados, donde las necesidades eran otras. Lamentablemente, nuestro cerebro no ha evolucionado tanto en ese aspecto. Y para atacar esta negatividad inherente, tenemos que hacer un esfuerzo y armar un “circuito de lo positivo”, como lo llama Breuning.

¿Cómo hacerlo según la autora del libro? Piensa durante un minuto –tres veces al día, durante 45 días– sólo en cosas positivas. Esta especie de entrenamiento hará que tu cerebro empiece a buscar las cosas positivas por sobre las negativas.

 

 

Otro consejo que da Loretta para complementar este ejercicio, es que tengamos expectativas realistas de las cosas para que no siempre estemos desilusionándonos si algo no resulta como esperábamos.