¿Haz escuchado que tomar agua caliente con limón te puede ayudar a perder peso? ¿Haz escuchado también que el pomelo ayuda a bajar de peso? Bueno, entonces junta las dos cosas agregando pomelo a tu clásica agua con limón. Corta unas rodajas de pomelo y exprime el jugo en el agua (caliente o fría) o coloca un par de rodajas delgadas en el vaso.
Mientras que el agua de pomelo en sí no es un elixir mágico para la pérdida de peso, es una fruta de pocas calorías perfecta para agregar sabor a tu agua. Entonces, si lo tomas en lugar de un jugo, puedes ahorrarte cien calorías o más. Además, el pomelo también se considera un alimento que quema grasas, que reactiva el metabolismo y que frena los antojos.