No es raro que una esquina de tu armario esté reservada para aquellas piezas que te encantaría usar, en teoría, pero rara vez lo haces porque requieren mucho esfuerzo para cuidarlas. Todas tenemos esos artículos: la camisa constantemente arrugada, la blusa extra delicada, las botas de gamuza blanca que se rayan en el momento en que sales de la casa y los suéteres propensos al pilling. Si te da flojera tratarlas (lo que es muy entendible), estas piezas probablemente rara vez ven la luz del día. ¡Pero no tiene por qué ser así!
A continuación, reunimos cuatro categorías de artículos de lujo que son realmente fáciles de cuidar.
1. Seda lavable.
Levanta la mano si alguna vez has evitado comprar artículos de seda porque pensaste que sería una molestia cuidarlos. Bueno, es posible que quieras reconsiderar esa idea porque hay prendas de seda que puedes lavar tu misma en tu casa y a máquina.
2. Botas resistentes al agua.
Te perdonaremos si sucumbes a la tentación de comprar esas botas de gamuza blancas, pero al menos tienes que admitir que probablemente no durarán más de una temporada. Si estás buscando invertir en botas duraderas, busca unas que sean impermeables para que puedas caminar a través de la lluvia sin preocuparte de que estés destrozando tus zapatos.
3. Telas que no se arruguen.
¿Has dejado que ciertas piezas reposen en tu armario durante meses porque no quieres plancharlas? La respuesta creemos que es sí. Te contamos que existen telas que están específicamente diseñadas para no tener que plancharlas, así no pierdes tu valioso tiempo quitando arrugas.
4. Chalecos anti pilling.
El secreto es el material de algodón, que es igual de cómodo pero menos propenso al pilling en comparación con los sweaters de punto tradicionales.