Hay unos simples mantras que realmente nos inspiran, y si los repites en tu día a día, estamos seguras que te harán un a persona más feliz. Incluso, una buena idea para tenerlos presentes es tenerlos anotados en lugares que puedas ver permanentemente, para que así empiecen a ser parte de tu rutina sin siquiera pensarlo.
¿Quieres saber cuáles son? Sigue leyendo, toma nota y empieza a aplicarlos en tu vida!
1. “La vida es un viaje, no un destino”.
Esta es una frase antigua pero que no pasa de moda. Incluso, una buena idea es mantenerla escrita al lado de tu escritorio. A veces nos quedamos atrapadas en los plazos y olvidamos que la vida avanza. La próxima vez que te estreses en ese enorme proyecto, céntrate más en el trabajo que estás haciendo, y ve lo que puedes aprender de él. O la próxima que viajes, fíjate menos en el destino y más en la experiencia del viaje – literalmente!
2. “No lo llames sueño – llámalo plan”.
Siempre es fantástico tener esos grandes sueños para tu vida. Es cierto, a veces son poco realistas, pero para esos que sí son alcanzables (comprarte una casa o departamento, encontrar el amor, conseguir el trabajo de tus sueños) es momento de dejar de soñar y empezar a planificar! Los sueños pueden convertirse en realidad siempre y cuando tú des el primer paso para conseguir que realmente se cumplan.
3. “El mundo está lleno de gente buena – si no encuentras una, sé una”.
Sí, es cierto. Hay un montón de gente buena en el mundo, pero a veces sientes que no puedes encontrar ninguna! Verte a ti misma rodeada de personas poco amables puede ser un poco desalentador, pero si no puedes moverte de ese ambiente, ser la mejor versión de ti misma es el paso que tienes que dar. Básicamente, serás un espejo para todas las demás personas, y puede que eso incluso las aliente a ser mejores personas también.
4. “Eres lo que haces, no lo que dices”.
Las acciones siempre hablan mucho más fuerte que las palabras. Hablar es simple, y es fácil decir cualquier cosa que la persona con la que estás hablando quiera escuchar. Pero, para de verdad arreglar una relación o probarle a tu jefe que mereces ese ascenso o aumento, tienes que mostrarlo a través de tu comportamiento y acciones, y no sólo con promesas verbales.
5. “Vístete para impresionar”.
La primera impresión cuenta. Y por más que lo intentes, las personas nunca notarán tu gran intelecto antes de que noten tus zapatos rotos, así es la vida. Sería genial que todos fuéramos juzgados por nuestras cualidades intangibles, pero no es así – somos constantemente juzgados por cómo nos vemos. Entonces, en lugar de mirar mal a las personas más superficiales de este mundo, úsalo a tu favor. Elige tu ropa la noche anterior, despiértate 10 minutos antes para arreglar tu pelo y maquillaje. Sin importar la marca de la que sea tu ropa, preocúpate de plancharla y de que no tenga manchas ni pelusas o cualquier cosa que las haga ver mal.