Hay una buena razón por la que las semillas de chia han están siendo tan populares estos días. Estas pequeñas semillas son ricas en proteínas, fibra, calcio, antioxidantes y omega-3, pero aunque no lo creas, existe una forma correcta e incorrecta de comerlas.
En un caso de estudio de un paciente, un hombre experimentó una intensa disfagia (o dificultad para tragar), después de ingerir una cucharada de semillas de chia secas y luego tragarlas con agua. Una de las razones por las que las semillas de chía se promueven para la pérdida de peso, se debe a que expanden varias veces su tamaño en el agua y ayudan a sentirse satisfecho por más tiempo. Sin embrago, comerlas secas y tratar de tragarlas con agua no va a provocar una experiencia cómoda.
Remojar las semillas de chía en agua antes de comerlas es seguro; después de que se han empapado, desarrollan una capa gelatinosa que algunos de los partidarios de los alimentos crudos y sin procesar creen que ayuda a moverse más rápido a través del tracto digestivo. Otra evidencia sugiere que el consumo de semillas de chía molidas, en lugar de enteras, permite significativamente más ALA (la forma vegetal de los ácidos grasos Omega-3) en el torrente sanguíneo. Con todo esto dicho, hay investigación científica limitada sobre lo que es realmente mejor cuando se trata de la absorción de nutrientes.
Cuando está incluida en una receta, nuestro cuerpo puede digerir las semillas enteras (en la cantidad apropiada, obviamente), empapadas o molidas, para así obtener sus saludables beneficios. Si quieres agregar estas nutritivas semillas a tu dieta, aquí te dejamos unas recetas que te ayudarán!
Pudín de chía: Esta preparación funciona muy bien para el desayuno. Mezcla los ingredientes la noche anterior y déjalos reposar en el refrigerador. La mañana siguiente te encontrarás con una rica sorpresa. Así de fácil. Encuentra la receta aquí.
Bebida para deshinchar: Si te sientes hinchada, es momento de incorporar un nuevo ritual cada mañana que incluye chía. Es perfecto como previo a un entrenamiento y sólo necesitas tres ingredientes. Encuentra la receta aquí.
Muffins de chía y arándanos: El clásico muffins de arándanos tiene una actualización gracias a su contenido de chía. Encuentra aquí la receta.
Smoothie antioxidante de berries: Si encuentras que su textura crujiente es un poco desagradable, trata de agregar chía en tu batido de la mañana. Esta receta tiene un alto contenido de vitamina C y cuenta con más de 10 gramos de fibra. Seguro se convertirá en tu nuevo desayuno favorito.
Salpicadas sobre yogurt: Si estás buscando una forma rápida de agregar omega 3 en tus snacks, entonces espolvorea una cucharada de semillas de chia sobre fruta, o sobre tu yogurt. O haz una deliciosa combinación entre los dos!