Que tenga una completa dosis de proteína y sea baja en calorías, una buena ensalada puede ser una comida sana que te quite el hambre. Pero ¿cuál es el secreto detrás de una completa y nutritiva ensalada? Muy simple: tiene que incluir todos los macronutrientes (proteína, grasas y carbohidratos). Acá te damos los detalles de cómo armar esa llenadora, saludable y rica ensalada.
1. Gran cantidad de vegetales
Hay que tratar de incorporar las verduras de todo el arcoíris. Empieza con una sólida base de vegetales verdes como espinaca, kale o lechuga. Luego puedes agregar zanahorias, pepino o brócoli. Mientras más diversidad de vegetales tenga tu ensalada, mayor cantidad de antiácidos (ayudan a evitar indigestión y acidez), nutrientes, fibra (que ayuda a dar sensación de plenitud) y fitoquímicos estarás consumiendo.
2. Proteína
Las proteínas dan la sensación de estar satisfecho y ayudan a construir músculo, lo que hace que el metabolismo funcione. Las más recomendadas son huevos duros, pescado, tofu, pollo, pavo, carne o cerdo. Lo ideal es que la proteína elegida que sea del porte de la palma de tu mano.
3. Carbohidratos
Lo más recomendado es incluir carbohidratos complejos porque se demoran más tiempo en digerirse, lo que significa que te mantendrán satisfecho por más tiempo. Puede ser media taza de algún tipo de porotos, que además tienen fibra, o granos como quinoa, farro (un cereal parecido al trigo) o pasta, la que debe estar en pequeñas cantidades eso si.
4. Grasas
Las grasas saludables son bienvenidas en una ensalada porque ayudan a la digestión de las vitaminas A, D, E y K y dan sensación de estar satisfecho. Lo más recomendado son los aliños de vinagreta o de yogurt, que deben ser incorporados en pequeñas cantidades.