Esta tendencia tenía definitivamente los días contados para que volviera a aparecer entre nosotras. A pesar de pertenecer a un estilo sutilmente masculino (ya que los primeros que vimos pertenecieron al closet de nuestro papá) tienen la capacidad de entregarnos a nosotras un look resuelto, empoderado y ejecutivo.
Veremos luego el “renacer” de las blusas románticas, vestidos y polleras con vuelos e infladas, también otros diseños dentro de este estilo.
Esta tendencia se encarga de exagerar ciertos “items” femeninos para potenciarlos en su máximo esplendor. Es por eso que nos encontramos con cintas enormes, panties de color, cinturas marcadas, flores, zapatos con taco y otros factores que completan el estilo de manera romántica y femenina.
