Solo necesitas una pared para practicar esta corta pero intensa rutina que se compone de dos ejercicios: sentadilla en pared y plancha. La idea es hacer circuitos de 1 minuto (idealmente) por cada ejercicio, con los descansos necesarios y el tiempo que aguante cada uno. Y aunque suena simple es tremendamente desafiante y efectivo. Así que te invitamos a buscar una pared y ¡darle con todo!
Si quieres trabajar tu trasero y la idea de hacer otra sentadilla te dan ganas de llorar, esta variación en puente le dará a tus glúteos la forma que buscas. Este movimiento se concentra sobretodo en tu espalda. Y aunque estás en el suelo, se ejercita todo el cuerpo. Tus glúteos activan este movimiento, pero tu pecho y hombros también estarán trabajando.
Ejercicio en puente con una sola pierna
– Empieza sentada, con tus manos a un pie de distancia de tu trasero y apuntando los dedos hacia el lado opuesto de tu mirada. Tus pies deben estar a aproximadamente 50 cms de tu trasero, con el talón derecho apoyado sobre el mat y con el pie izquierdo en el aire un poco más arriba del mat.
– Presiona el talón derecho sobre el suelo para activar tus glúteos mientras te levantas a una posición de tabla y endereza tu pierna izquierda, manteniendo tus muslos paralelos. Resiste las ganas de dejar caer tu cabeza mientras haces esto y trata de mantenerla levantada. No dobles los codos.
– Lentamente baja tu trasero al piso, volviendo a la posición donde empezaste. Esto completa un ejercicio.
– Haz dos o tres sesiones de 10 a 12 repeticiones en cada pierna.